Muchos dicen que a veces lo importante son las herramientas. La calidad de los productos. Con buenas herramientas y buenos productos es más fácil conseguir un buen resultado. Otros dicen que lo importante es la técnica. Que con buena mano y técnica se consiguen buenos resultados con poca cosa. Como en todo, yo creo que existe un término medio. En el caso que nos ocupa opino que es muy necesario hacerse con buenas brochas. Lo que no significa que tengan que ser las más caras. Tenemos muchas opciones ahora mismo en el mercado con muy buena relación calidad-precio. Disponemos de muchísima información online con las experiencias de otros usuarios. Lo que nos podrá ayudar mucho a la hora de elegir lo que mejor se adapte a nuestro bolsillo y a nuestras necesidades.
Tampoco hay que volverse loco y querer tener todas las de Bobbi Brown o MAC a la vez (por decir alguna marca). Es mejor empezar poco a poco e ir viendo nuestras necesidades. Yo empecé con las brochas de Deliplús y tan contenta. Muchas de ellas las sigo usando porque me encantan.
Otra cosa que tampoco es nada recomendable es intentar comprar por eBay brochas caras a precio de risa. Nadie da dos duros a cuatro pesetas (¿cómo será esto en euros?). Y os lo digo por experiencia. Me colaron en eBay una 150 y una 168 de MAC más falsas que Pancho llorando la muerte de Chanquete. Cuando empecé a querer sustituir mis brochas de Deliplús por las de MAC todavía no existía Sigma. Yo creo que si hubiese existido me hubiese decantado por la manta con las básicas.
Tengo alguna más, pero aquí os voy presentando mis brochas preferidas o las que más uso:
ROSTRO:
La 187 de MAC. La famosísima mofeta. No podría vivir sin ella. Tengo tres, ésta grande y otras dos de las pequeñas de colección (una de ellas está en intercambios, la otra la llevo en el neceser del bolso). La grande la uso para las bases de maquillaje, líquidas o compactas. Me resulta muy cómoda, rápida, y me encanta el acabado que deja.
188 de MAC. Es la hermana pequeña de la 187. La suelo usar para aplicar coloretes muy pigmentados como el Tippy de la colección HK o el Gentle de MAC y el Outlaw de NARS. No la considero un imprescindible.
La 190 tampoco la considero un imprescindible, es la típica brocha sintética para aplicar bases líquidas. La uso alguna vez para echarme la hidratante o el primer. Recomiendan hacerlo así para evitar ponernos cantidades excesivas. Sinceramente, no encuentro mucha diferencia entre ésta brocha y la de Deliplús.
Al igual que la 187, la 109 de MAC es una brocha polivalente. La uso para el contorno, para el colorete y para el iluminador. Algunas chicas la usan incluso para aplicarse la base líquida. En ésta brocha se puede apreciar uno de los grandes fallos de MAC. ¡Se borra el número! La solución es aplicar una pequeña capa de esmalte de uñas transparente. Pero aún así a mí se me han ido borrando en algunas.
Y sí, lo sé. Hay brochas más allá de MAC y de la misma o incluso mejor calidad. Más baratas y más caras. Aquí os presento a mi favorita entre las favoritas, mi brocha de colorete. Es de Trish McEvoy. Conocí ésta marca, como casi todo lo que sé de cosmética y maquillaje, a través de maccounter (como ya he dicho otras veces es un pozo de sabiduría potinguil) y de la mano de una de las chicas más chic de todo el foro (grazie mille). Es la la Brush 2b Sheer Blush y la compré en Kissandmakeupny. Es lo más suave que he tocado en mi vida.
Y hasta aquí mis favoritas del rostro, sin olvidar mis Kabukis del alma que ya os presenté en otro post. Para polvos uso mi fake de la 150. A pesar de ser falsa es bastante suave. Y me he obligado a usarla como castigo por comprarla por eBay. Espero poder sustituirla algún día por la de polvos de Trish McEvoy.
OJOS:
El 239 que venía con el pack de brochas de la colección de Hello Kitty de MAC. Es la que uso para aplicar la sombra base. Aunque también utilizo el pincel sombra pony de Deliplús, que me parece estupendo y un regalo por el precio que tiene. Y cuando estoy usando varias sombras me viene genial tener pinceles extra.
Para difuminar las sombras utilizo el 217 y el 226. El segundo acaba en punta y es genial para difuminar la uve externa del ojo y para hacer las bananas. Sale de vez en cuando con alguna colección. Antes usaba para difuminar el 224, que también es increíble. Pero desde que hice un curso de automaquillaje y la chica me lo recomendó para aplicar el corrector, no le doy otro uso (no le he hecho foto porque lo tengo bastante sucio). El pincel difuminador de sombras de Deliplús también está muy bien.
Y por último no puedo olvidar mi 266, desde que me lo compré mis delineados son otra cosa. Es un pincelito biselado que me facilita un montón esa difícil tarea. El 266 y el gel liner hacen un tándem perfecto. El de Deliplús es un pelín más pequeño y no me apaño tan bien con él. Lo uso más bien para difuminar. Pero es una buena opción.
Pincel 266
Para limpiezas más profundas una vez a la semana (a veces cada dos) utilizo un jabón o champú neutro y mascarilla (de vez en cuando) para las brochas de pelo natural, y Fairy para las brochas sintéticas (estupendo consejo de Potis de Colores).
Para limpiarlas a diario entre uso y uso utilizo el limpiador de brochas de Make Up Forever, me decanté por éste y no por el de MAC porque el de MUFE viene con aplicador spray. Cuando se me termine probaré el de MAC y reutilizaré éste bote.
Para limpiezas más profundas una vez a la semana (a veces cada dos) utilizo un jabón o champú neutro y mascarilla (de vez en cuando) para las brochas de pelo natural, y Fairy para las brochas sintéticas (estupendo consejo de Potis de Colores).
Creo que me ha quedado una entrada un poco larga, ¡y eso que me he dejado alguna brocha y pincel en el tintero! Espero no haberos aburrido mucho.
Si alguien está interesada en mis avances con el Wreck This Journal puede ver cómo voy actualizando el álbum en mi Flickr. No quería cargar el post de hoy con más fotos.
¡Gracias por leerme!